Sobre la “Amnistía Fiscal”

La amnistía fiscal encara su recta final

La llamada amnistía fiscal (en concreto la Declaración tributaria especial) encara su recta final; el viernes 30 de noviembre de 2012 es el último día posible para la presentación del modelo 750, desde que se estableciera la llamada amnistía mediante lo establecido en el Real Decreto-ley 12/2012, de 30 de marzo. Posteriormente, la Orden HAP/1182/2012, de 31 de mayo, se encargó de establecer el procedimiento de la declaración tributaria especial.

En estos meses, y sobre todo en los momentos iniciales, la incertidumbre con los aspectos relacionados al proceso ha sido máxima. Así, la Administración tributaria se ha visto obligada a la emisión de dos informes mediante los cuales se pretendía resolver algunas de las cuestiones prácticas de la declaración tributaria especial. Los datos de declaraciones y de recaudación de los primeros meses fueron muy discretos, lo que mostraba la desconfianza del contribuyente hacia la declaración especial. No obstante, en estas últimas semanas se prevé la mayor parte de las presentaciones de declaraciones.

Mucha de la “culpa” del aumento de la presentación de declaración especiales la tiene la Ley 7/2012, de 29 de octubre, de modificación de la normativa tributaria y presupuestaria y de adecuación de la normativa financiera para la intensificación de las actuaciones en la prevención y lucha contra el fraude, conocida como "ley antifraude". Entre otros aspectos, esta Ley fija la obligatoriedad para todos los contribuyentes de suministrar información sobre cuentas y valores situados en el extranjero, estrechándose el margen para la ocultación de información en el extranjero. Se prevén además sanciones muy importantes en el caso de que posteriormente se detecten bienes ocultos que no hayan sido declarados por el contribuyente.

Así, esta nueva Ley contra el fraude fiscal supone un complemento perfecto a la llamada Amnistía fiscal. Mediante este proceso (plan extraordinario de regularización de rentas ocultas), el Gobierno pretendía recaudar 2.500 millones de euros, mediante la afloración de bienes ocultos.

El éxito final de este proceso está por ver…