Consejos del Banco de España en el ámbito fiscal y laboral – Tribuna INEAF

El Banco de España acaba de publicar el informe anual relativo al año 2014 en el que se analiza la evolución de la economía española desde una perspectiva global. En este informe, se describen además, una serie de consejos que deberían llevarse a cabo para que nuestro país siga en fase de recuperación como lo viene haciendo en este último año, tendencia que se prevé que seguirá a corto y medio plazo según analistas privados e institucionales y el propio Banco de España. Vamos a destacar los principales consejos del ámbito fiscal y laboral.

Para cumplir los objetivos presupuestarios, se requiere reforzar el plan de consolidación fiscal. De este modo, podría considerarse aumentar el peso relativo de la imposición indirecta para lo que habría que ampliar las bases del IVA. También se aconseja incrementar los impuestos especiales y la fiscalidad medioambiental además de racionalizar la amplia gama de deducciones, bonificaciones y reducciones, pues estas reducen finalmente la recaudación de impuestos.

El futuro de las pensiones del sistema público es bastante frágil. En este sentido y para evitar incertidumbres sobre las futuras pensiones, se plantea la necesidad de fomentar la introducción y contratación de mecanismos de seguro y ahorro que ayuden a complementar en el futuro las pensiones del sistema público, incluyendo incentivos fiscales de los mismos.

En cuanto al mercado laboral, debe de continuarse con su proceso de transformación mediante un mejor funcionamiento de las políticas activas de empleo. El cambio de estrategias debe de ir acompañado de una evaluación rigurosa de los distintos programas, lo que exige mejorar la información disponible sobre el coste y la efectividad de las diferentes medidas de apoyo a los desempleados. Se requiere además una evaluación y reordenación del conjunto de bonificaciones existentes para así liberar recursos que podrían destinarse entre otras cuestiones, para profundizar en el proceso de modernización de los servicios públicos de empleo, que permita diseñar itinerarios individualizados de inserción para los desempleados.

No olvidemos además que nuestro país, a pesar de los cambios introducidos para favorecer la contratación indefinida, sigue teniendo una elevada temporalidad laboral. Es por ello por lo que las actuaciones deben ir dirigidas a reequilibrar los incentivos para la contratación indefinida, reduciendo la diferencia que separa las condiciones de terminación de las distintas modalidades de contratación y facilitando una mayor continuidad entre ellas.

Hasta ahora, se ha trabajado duro y se ha conseguido una economía más saneada y competitiva, pero es cierto que “el proceso de ajuste y reequilibrio no ha finalizado”. Estos consejos son los que deberían de acometerse en los próximos años para seguir avanzando.