Contabilidad de las operaciones con tarjeta de crédito y débito

Aunque en el mundo empresarial los cobros y pagos con tarjeta hace ya muchos años que forman parte de su rutina, es cierto que desde el año 2012 con la limitación de los pagos en efectivo su uso se ha multiplicado y generalizado mucho más. Como medida para prevenir y luchar contra el fraude, cualquier operación de pago de más de 2.500 euros en la que una de las partes sea un profesional o una empresa no podrá realizarse con dinero en efectivo y deberá hacerse por otros medios, entre ellos, con tarjeta.

Queremos ver los apuntes contables que se generan en las operaciones de pagos y cobros con tarjetas de crédito y débito en la empresa.

Operaciones de pago con tarjeta

Las empresas realizan gran parte de sus pagos y hacen retiradas de efectivo con sus tarjetas todos los días suponiéndoles además unos gastos de diversa naturaleza. Su contabilidad no supone gran complejidad (siempre que se sea suficientemente ordenado) pues en realidad se trata de movimientos en la cuenta de banco o en la de una póliza de crédito. Los apuntes van a depender del tipo de tarjeta de pago que estemos utilizando, esto es, si es una tarjeta de débito o de crédito.

a) Tarjeta de débito

En la tarjeta de débito el banco nos va a cargar el pago directamente en nuestra cuenta corriente por lo que solo podremos usarla mientras tengamos fondos en la misma. Por comodidad, la entidad financiera nos permite varias modalidades de hacer el cargo como son el pago al contado o a final de mes.

Si el pago es al contado,

Simplemente en cada operación nos cargaran “sobre la marcha” su importe sin más, ni gastos ni intereses.

En la cuenta (572…) Banco XXX  está el cargo de la tarjeta.

Si el pago es a final de mes

Lo normal es que la entidad financiera no nos cargue nada hasta final del mes siguiente, donde acumulará todas las operaciones realizadas. En este caso, mientras nos hacen el cargo en nuestra cuenta corriente podemos utilizar una subcuenta de la (520) para reflejar estas operaciones. Es normal anotar en esta cuenta los últimos dígitos de nuestra tarjeta, quedando como sigue: (52017359) Tarjeta BBVA 17359.

• En el momento del gasto

Este asiento puede ser de un gasto genérico, pero podemos hacer también por ejemplo una compra a un proveedor concreto y su pago con tarjeta.

• En el momento en que el banco hace la liquidación y el cargo en nuestra cuenta corriente (normalmente al final del mes siguiente)

De esta manera queda cancelada la cuenta (52017359) al final del mes. Hoy en día con la información de la que disponemos a través de nuestras aplicaciones con el banco, el cuadre de esta cuenta para cancelarla todos los meses no debe generar problemas.

Por la disposición que hagamos en efectivo

Si hacemos una retirada en efectivo, por ejemplo de un cajero, y no nos cobran ningún tipo de gasto, el apunte sería:

b) Tarjeta de crédito

Cuando pagamos con la tarjeta de crédito no lo hacemos con los fondos de nuestra cuenta corriente, sino que el que realmente paga es nuestro Banco. Nos está prestando el dinero en ese momento y  nos lo cobrará más adelante, con gastos e intereses.

Por la disposición que hagamos en efectivo

En este caso nos cobran un interés por la operación

• Por los posibles gastos que paguemos con esta tarjeta

• En el momento en que el banco hace la liquidación y el cargo en nuestra cuenta corriente (normalmente al final del mes siguiente)

Operaciones de cobro con tarjeta

Cada vez es más habitual que nuestros clientes nos paguen con tarjeta en lugar de hacerlo en efectivo, ya sea por seguridad, comodidad o costumbre. Las empresas cuentan para ello con terminales (TPV) facilitados por el banco para que el cliente haga el pago. Estos terminales no son gratis y le van a costar a la empresa unos gastos e intereses. La comisión e intereses que se pagan van a depender de varios factores como la entidad financiera con la que se trabaja, si además coincide o no con la del cliente que nos ha hecho la compra. Pero, en definitiva, la contabilidad será la misma y la resumimos en los siguientes apuntes:

Supongamos la prestación de un servicio por importe de 1.500 euros que cobramos al cliente con tarjeta y que la comisión pactada con la entidad financiera sea un 3%.. La comisión pactada y en su caso los posibles intereses tienen la consideración de gastos financieros.

Por la liquidación que nos hace el banco, suponiendo la comisión del 2% y unos intereses de 40 euros