¿Puedo llevar a mi mascota al alojamiento de mis vacaciones? Esto es lo que dice la ley

El momento de elegir un destino vacacional se erige como uno de los momentos más importantes del año. Buscamos entre miles de opciones para ver dónde podremos sacar la mejor foto y dónde nos sentará mejor el mojito. Sin embargo, cada vez hay más personas que cuentan con una mascota en su familia. ¿Y qué pasa con ella? ¿Puede venir conmigo al hotel o al alquiler vacacional que yo vaya? Vamos a analizar qué dice la Ley de Arrendamientos Urbanos sobre esto.

Cada vez existen más alojamientos dogfriendly que permiten sin ningún problema la entrada de animales como puede ser los perros o los gatos. Sin embargo, ¿puedo llevar mi mascota al hotel que desee? ¿Existe alguna norma que me ampare o permita a los hoteles y alojamientos prohibir la entrada de mi mascota? Para responder a estas preguntas nos vamos a centrar en el Código de Animales de Compañía y en la Ley de Arrendamientos Urbanos.

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¿Te pueden prohibir alojarte en un hotel con tu mascota?

Lo primero que debemos resaltar es que cada vez son más los hoteles que ofrecen sus instalaciones tanto para personas como para sus mascotas. En España, la mayoría de ciudades cuenta con esta posibilidad para los que cuentan con un perro o un gato, y es que es una tendencia al alza, ya que muchas personas deciden viajar con su mascota y no dejarla con alguien cuidándola o en alguna residencia para animales.

Sin embargo, el Código de Animales de Compañía recoge, entre otras leyes, la ley 11/2003, de 24 de noviembre, que afronta este tema. Este código deja bien claro que los animales pueden tener limitado su acceso a hoteles, restaurantes, bares o cualquier establecimiento en el que se sirva comida y bebida. Ahora bien, para ello, el dueño del establecimiento tiene que haber estipulado esas condiciones.

Lo que nos deja esta norma es un escenario incierto, en el que la persona que tiene un animal debe de revisar bien a qué establecimientos. El dueño de dicho establecimiento siempre va a tener el poder de aceptar o no a tu mascota, por lo que el trabajo previo al viaje resulta fundamental. Hoy en día, a través de Internet se puede ver de forma sencilla qué hoteles o restaurantes te van a permitir estar con tu mascota.

¿Y qué pasa si alquilo un apartamento o una vivienda?

¿Pueden prohibir la entrada a mi perro en un Airbnb? Para contestar a esta pregunta tenemos que acudir a la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU). Esta ley, en su artículo 4.2, indica que los alquileres de una vivienda se regirán por las cláusulas y condiciones que negocien los implicados. Es decir, que el dueño del alojamiento puede imponer la condición o cláusula de que no quiere mascotas, de manera que sepas este hecho.

En el caso de que el alojamiento no recoja una prohibición de los animales de compañía, tendrás que preguntar y negociar este hecho. Aun así, si no se recoge de manera explícita, no debería de haber ningún problema legal al respecto. En este caso, podrías acudir con tu mascota, aunque es verdad que te puedes encontrar con que la comunidad de vecinos o la urbanización prohíba la presencia de animales. Este suceso puede estar presente en los estatutos de la comunidad.

Consejos para viajar con tu perro y disfrutar de tus vacaciones

En INEAF, queremos terminar este post con una serie de recomendaciones que debes tener en cuenta a la hora de viajar con tu mascota. Vamos a dejar a un lado la legislación por un momento para tocar otras cuestiones importantes para ti y para tu mascota. Por ejemplo, ¿qué debes llevar en tu maleta? Siempre debes llevar su documentación o DNI, un pequeño botiquín, su correo, su toalla, su cama y su bol para comer, entre otras cosas.

A continuación, seguir dándote consejos para viajar con tu perro a través de este listado:

• Tienes que pensar bien el destino al que ir: si se llega en avión, debes preparar todo para tu mascota. ¿Se siente ansioso cuando se separa de ti o desconfía de terceras personas? Entonces, viajar en bodega puede ser un martirio para él. Piensa bien en tu mascota y escoge el medio de transporte y destino en el que se vaya a sentir más cómodo.
• Lleva ciertos accesorios que sean familiares para él. Por ejemplo, si viajas con tu perro, lleva sus juguetes, su comedero y su arnés para que se sienta como en casa en momentos de estrés.
• A la hora de comer en algunos restaurantes o de asistir a lugares como el hotel, una buena práctica es conseguir que tu perro llegue cansado para que le apetezca descansar, estar sentado y estar tranquila.
• La hidratación es importante. Asegúrate de que tu mascota bebe suficiente agua, de manera recurrente.
• Por último, disfruta muchísimo de la experiencia. No hay nada cómo conectar profundamente con tu mascota y sentir esa comodidad y entendimiento. Nada como pasar tiempo con tu animal de compañía para reforzar el vínculo.