Al finalizar la carrera de derecho, son muchas las personas que comienzan a plantearse cuál será el siguiente paso para poder especializarse. En este sentido, las salidas profesionales del registrador de la propiedad muestran una oportunidad de conseguir un puesto de trabajo estable y con muchas posibilidades de crecimiento.
En este post realizaremos un recorrido profesional por las funciones que llevan a cabo y por los aspectos que se necesitan para poder ejercer como registrador de la propiedad. Si, además quieres acceder al sector inmobiliario, te recomendamos que te matricules en el curso superior en tasaciones inmobiliarias de INEAF.
¿Qué hace un Registrador de la Propiedad?
El registrador de la Propiedad, Bienes Muebles y Mercantiles forma parte del cuerpo de funcionarios públicos del Estado. Es decir, para alcanzar las salidas profesionales del registrador de la propiedad es necesario superar una oposición.
Con el tratamiento de “señoría” dentro de los Registros de la Propiedad estos funcionarios son los máximos responsables, ya que, además ostentan el cargo de titulares.
Las funciones del registrador de la propiedad son las siguientes:
- En las correspondientes circunscripciones territoriales, los registradores se encargan de llevar los Registros de la Propiedad, Bienes Muebles y Mercantiles.
- Las inscripciones en el Registro al que pertenezcan de un acto que afecte a un bien, pasarán por sus manos, siendo estos los que determinen si los documentos son legales o no.
- Admitidos los documentos como legales y válidos, el registrador dejará constancia de lo solicitado a través de asientos y anotaciones. Estos asientos serán considerados como hechos públicos y podrá solicitarse información al respecto por aquellas personas que tengan un interés legítimo.
Su territorio: el Registro de la Propiedad
El objetivo de esta institución pública es dejar constancia de la situación jurídica de los bienes. A modo de ejemplo, pueden existir inmuebles con derechos reales como servidumbres o hipotecas, por lo que, debe ser reflejado para conocimiento de futuros compradores.
Se garantiza, de esta forma, que el mercado inmobiliario sea más seguro jurídicamente, ya que, en los asientos o inscripciones queda constancia del titular o titulares del bien y los derechos que pueden recaer sobre terceras personas.
La inscripción de los inmuebles o los derechos reales en España, son un acto voluntario. Ahora bien, la ventaja de esta inscripción está en favorecer una protección legal a los titulares frente a una hipotética y futura contienda judicial ante los tribunales. Además, a efectos de financiación o de facilitar la transmisión de los bienes, esta inscripción es ventajosa.
¿Cómo ser registrador de la propiedad?
Las personas interesadas en aprovechar las salidas profesionales del registrador de la propiedad deberán de saber que, para su ingreso en el cuerpo de funcionarios, se requiere de cumplir los siguientes requisitos:
- Ser mayor de edad y español
- No tener ninguna incapacidad o imposibilidad legal para ejercer como registrador
- Ser graduado o licenciado en derecho
- No haber sido separado del servicio de cualquiera de las Administraciones Públicas por resolución firme dictada como consecuencia de expediente disciplinario
- Superar el proceso de oposición libre. Habitualmente se celebran cada 2 años puesto que se altera con otra oposición, la de Notaría
Aprobada la oposición, estos funcionarios ya podrán optar por las salidas profesionales del registrador de la propiedad en tres registros diferentes:
- Registro de la Propiedad
- Registro Mercantil
- Registro de Bienes Muebles
Al seleccionar entre una de estas salidas profesionales del registrador de la propiedad, el aspirante tendrá la oportunidad de especializarse en ramas concretas del derecho mientras prepara la oposición.
¿Cómo son las oposiciones a registrador de la propiedad?
La media habitual para aprobar las oposiciones a registrador de la propiedad está en torno a los 5-7 años. Su complejidad se debe a la amplitud de su temario y a la limitación de plazas ofertadas por el Ministerio de Justicia. Y es que, habitualmente son 50 las plazas ofertadas por convocatoria, siendo 5 de estas reservadas a personas con discapacidad.
La oposición cuenta con 4 ejercicios eliminatorios, de los cuales, 2 son escritos y 2 orales. El temario, que consta de 350 temas, se recoge en la Resolución de la Dirección General de Registros y del Notariado de 19 de julio de 2015.
El temario se divide en dos bloques:
Primero
- Civil: 125 temas
- Mercantil: 57 temas
- Administrativo: 16 temas
- Procesal: 22 temas
Segunda
- Hipotecario: 73 temas
- Fiscal: 39 temas
- Notarial: 18 temas
El proceso se desarrollará de la siguiente forma:
Primer ejercicio
- Modalidad oral
- Tiempo 1 h
- Desarrollo de 5 temas extraídos al azar del primer bloque
Segundo ejercicio
- Modalidad oral
- Tiempo 1 h
- Desarrollo de 5 temas extraídos al azar del segundo bloque
Tercer ejercicio
- Modalidad escrita
- Tiempo 6 h
- Realizar una calificación de un documento y redactar un informe que será leído en sesión pública
Cuarto ejercicio
- Modalidad escrita
- Tiempo 6 h
- Realizar unas operaciones de liquidación de impuestos y registro
¿Cuánto gana un registrador de la propiedad?
Aunque el registrador de la propiedad tenga el carácter de funcionario público, la realidad es que son un puesto semipúblico. En otras palabras, en cualquiera de las salidas profesionales del registrador de la propiedad, el salario no procederá exclusivamente de los Presupuestos Generales del Estado, sino que cobrarán directamente de los clientes.
Consecuentemente, el volumen de trabajo será el que determine sus ingresos. No obstante, la media del sueldo de un registrador de la propiedad se encuentra en torno a los 15.000 € brutos mensuales. Ahora bien, este sueldo será inferior, ya que, deberán de afrontar otros gastos como el alquiler de oficinas o los suministros de luz y agua, entre otros.
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