Ya ha empezado la lucha en las comunidades autónomas para las próximas elecciones y es muy probable que los candidatos, ya sean de izquierdas o de derechas, prometan una bajada de impuestos. Pero la información del Programa de Estabilidad que el Gobierno ha remitido a Bruselas, al parecer, demuestran que no va a ser posible.
Este programa pone de manifiesto que las comunidades son quienes generan mayores deudas. El ejercicio 2014 se cerró con un desfase de ingreso y gastos de 17.541 millones de euros, lo que supone un déficit del 1,68%. Y es muy probable que de nuevo no se cumpla al objetivo de estabilidad, pues tal cifra debe reducirse hasta el 0,7% este año, lo que se traduce en un recorte aproximado de 10.000 millones de euros.
Para el ejercicio 2016 el déficit debe ser del 0,3% y en 2017 del 0,1% para lograr así el equilibrio en 2018. Para ello, y según el Programa de Estabilidad, las comunidades autónomas deben aplicar subidas fiscales a partir del próximo año para obtener ingresos adicionales. Por tanto, el Gobierno central comunica la subida inminente de impuestos en las autonomías oponiéndose a las promesas de bajadas de impuestos de los distintos partidos políticos en las comunidades. No olvidemos además que en el IRPF las comunidades han seguido la misma línea de la reducción de tipos que aprobó el Gobierno en el tramo estatal.
Aun así, los aumentos de impuestos no se plantean en el Impuesto sobre la Renta o Sucesiones y Donaciones sino que según el programa de estabilidad, se centrarán en Tributos medioambientales, que se prevé que aportarán unos 250 millones de euros en los dos próximos años y en el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados (ITP y AJD), que recaudará 350 millones de euros más.
Igualmente, para cumplir con los objetivos marcados de déficit, deberán de recortar el gasto público. Para ello, según el programa, se mantendrá la no reposición de funcionarios, excepto en áreas prioritarias, hasta 2018, lo que supondrá un ahorro acumulado de unos 2.356 millones de euros. Esta línea se seguirá en la Administración central y en la local. También se ahorrará en Sanidad debido a las compras centralizadas de medicamentos y del copago farmacéutico.
Este Programa de Estabilidad, además, ha corregido las previsiones erróneas de informes anteriores como es el caso del Impuesto sobre Sociedades. El Gobierno, había previsto que los tipos reducidos para empresas de nueva creación en los dos primeros ejercicios, la deducción del 10% de los beneficios reinvertidos o la modificación del régimen fiscal de activos intangibles generaría un ahorro de 890 millones. En el último programa se certifica que sólo ha llegado a los 58 millones, el 6,5% de lo previsto. Ocurre igual con la eliminación de la deducción del deterioro de valor de las participaciones, lo que en un principio estaba estimado que recaudaría 3.650 millones de euros, finalmente ha recaudado 472 millones. Aun así, se han reducido las bases imponibles negativas pendientes de compensación, que podrá generar una mayor recaudación en el futuro.
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