Avalista

Un avalista es una persona que asume la responsabilidad de pagar una deuda en caso de que el deudor principal no pueda hacerlo. Básicamente, el avalista ofrece su respaldo financiero para cubrir el préstamo que el avalado ha contraído, en caso de que este no cumpla con sus obligaciones financieras.

Los avalistas suelen ser individuos cercanos al prestatario, como familiares o amigos, que respaldan con su propia solvencia financiera el préstamo de otra persona. No todos los préstamos requieren de un aval. Los bancos suelen exigir el respaldo de un aval cuando el solicitante del préstamo tiene un historial crediticio insuficiente, ingresos limitados o no cumple completamente con los criterios de riesgo establecidos por la entidad financiera.

En estos casos, el avalista es sinónimo de una garantía adicional para el banco, ya que se compromete legalmente a asumir la deuda en caso de que el prestatario principal no pueda cumplir con sus obligaciones financieras.

Derechos del avalista

• Información clara: El avalista tiene derecho a recibir información clara y completa sobre los términos y condiciones del préstamo para el cual está avalando, el monto total del préstamo, la tasa de interés, plazos de pago, y cualquier otra condición relevante.
• Consentimiento informado: Antes de convertirse en avalista, la persona debe dar su consentimiento de manera consciente e informada.
• Notificación de impago: En caso de que el deudor principal no cumpla con sus obligaciones y se produzca un impago, el avalista tiene derecho a ser notificado de manera oportuna.
• Señalar el patrimonio del avalado: En caso de impago por parte del avalado deudor, el avalista puede recurrir a contabilizar los bienes de este para poder saldar la deuda íntegra. Antes de que el banco exija algún pago al avalista, ha de haberse asegurado de que el avalado sea efectivamente insolvente.
• Derecho de abono: El avalista tiene derecho a exigirle al avalado cualquier cantidad de dinero que este haya desembolsado, fruto de un impago por parte del deudor.

Obligaciones del avalista

• Pago de la deuda: La principal obligación del avalista es asumir la responsabilidad de pagar la deuda en caso de que el prestatario principal no lo haga. Por ello, deberá cubrir tanto el capital prestado como los intereses y otros cargos que puedan aplicarse.
• Cumplir con los términos del contrato: El avalista está obligado a cumplir con los términos y condiciones establecidos en el contrato de préstamo, por lo que deberá cumplir cualquier obligación financiera que figure en él.
• Comunicación con el prestamista: Es importante que el avalista mantenga una comunicación abierta con el prestamista. Si hay dificultades para realizar los pagos, es recomendable informar al prestamista de manera anticipada para explorar posibles soluciones y evitar consecuencias más graves.

¿Qué pasa si fallece un avalista?

Si fallece un avalista y el avalado se muestra insolvente a la hora de pagar su deuda, la obligación de pago recaerá sobre los herederos del avalista, como pasaría con cualquier otra obligación financiera. En este caso, el heredero puede tomar dos decisiones: rechazar la herencia, repudiando también la deuda, o aceptar la herencia, asumiendo los activos y pasivos del avalista.

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