Beligerancia
La beligerancia es la actitud o postura de quien está dispuesto a resolver un conflicto de forma violenta.
Proviene del latín “belligerantis”, que significa “el que hace la guerra”. Las dos palabras que lo forman son “bellum” (guerra) y “gerere” (comportamiento).
Este término se utiliza para aludir a los países que se encuentran enfrentados en un conflicto armado, o que realizan acciones hostiles con la intención de provocar una acción bélica.
En el derecho internacional se concede el estado de beligerancia tanto a estados como a grupos armados (grupos insurgentes, grupos terroristas, movimientos de liberación ciudadana, etc.) que intervienen en un conflicto bélico.
Por otro lado, en la política solo adquieren el título de beligerantes aquellos actores que destacan en el conflicto.
Dentro del derecho internacional, encontramos el derecho militar, que recoge las denominadas leyes de guerra.
Estas leyes se aplican a cualquier grupo activo dentro de un conflicto armado siempre y cuando se le considere como beligerante.
Por ello un sujeto beligerante podrá ser sometido al derecho de guerra.
El derecho de guerra y la condición de beligerante se han ido modificando a lo largo del tiempo, pero su revisión moderna se originó a partir del siglo XIX.
Los famosos convenios de Ginebra han establecido la regulación del derecho internacional para proteger a las víctimas de los conflictos bélicos.
Son cuatro las convenciones de Ginebra:
Primera Convención de Ginebra. Buscó mejorar la suerte de los heridos durante un conflicto armado. En esta convención es donde se prohibió cualquier ataque a instalaciones médicas, ya que los enfermos y heridos tienen derecho a ser tratados con humanidad.
Segunda Convención de Ginebra. Buscó mejorar la condición de los heridos, enfermos y náufragos durante las batallas navales.
Tercera Convención de Ginebra. Mejoró el tratamiento que deben recibir los prisioneros de guerra.
Aunque se especifican las protecciones humanitarias que deben recibir los prisioneros, son muchas las pruebas que demuestran que en la práctica la gran mayoría de ejércitos del mundo no cumplen lo pactado en dicha convención.
Son muchos los ejemplos que se han demostrado a lo largo de la historia y uno de los más escandalosos y recientes fue la tortura de prisioneros iraquíes por parte de soldados estadounidense en la prisión de Abu Ghraib durante la invasión de Irak de 2003.
Cuarta convención de Ginebra. Recoge una serie de leyes que busca proteger a los civiles durante tiempos de guerra.
El derecho de guerra tiene una serie de propósitos que busca reducir el daño que puede provocar un conflicto armado:
- Evitar que los conflictos armados se prolonguen en el tiempo.
- Reducir al máximo la destrucción causada durante el conflicto.
- Proteger a quienes no intervienen en el conflicto.
- Proteger a los heridos, sean o no combatientes.
- Facilitar todo el proceso de paz.
Desde el fin de la segunda guerra mundial, se han añadido tres protocolos adicionales que han incorporado algunos cambios debido a las características de la guerra moderna.
Actualmente la convención de ginebra ha sido adoptada por los 194 países del mundo.