Masa salarial
La masa salarial se conoce como la sumatoria de las remuneraciones en concepto de salario que una empresa, institución u organización distribuye entre sus empleados.
Se calcula teniendo en cuenta el salario bruto, y a parte se desglosan las partidas de cotización a la seguridad social y de impuestos por las retenciones de las personas físicas.
Con estos datos se pueden observar, por ejemplo, los salarios individualizados, el total de salarios líquidos, las contribuciones en el sistema de seguridad social de un país…
Si nos referimos al sector público, la masa salarial se refiere al salario total que reciben todos los empleados públicos, independientemente de la función o cargo que ocupen. El cálculo puede realizarse para un país, una provincia, un municipio o incluso una región.
Un ajuste de la masa salarial se llevará a cabo teniendo en cuenta factores como:
- La inflación del país, en el caso del sector público. Este dato afecta de manera inmediata y directa en el poder adquisitivo de la población de un país. Si la inflación es alta, las autoridades laborales deberían de considerar un ajuste al alza de la masa salarial con el objeto de que los trabajadores no pierdan su poder adquisitivo.
- La situación de la empresa u organización privada. Si la situación de la empresa es buena, los directivos pueden determinar incentivar a sus trabajadores mediante incentivos salariales. Pero en caso de que la empresa no esté pasando por un buen momento económico, esta partida puede ser objeto de recorte.
- La situación financiera del país. La masa salarial es el principal elemento de recorte que se baraja ante una situación económica delicada de un país. En el momento en que es necesario reducir gastos debido a un déficit de ingresos del sector público, esta partida de retribuciones es el principal objeto de recortes o congelación. Además, lo pueden hacer de manera inmediata a través un decreto o de una ley. De manera inversa, ante un crecimiento del PIB de una nación, se puede determinar un ajuste al alza de la masa salarial.
Una de las maneras que los gobiernos tienen para que la población pueda contar con unos ingresos dignos, es establecer un Salario Mínimo Interprofesional (SMI). Lo que se busca con esta medida es proteger a los trabajadores de la explotación laboral y fomentar la equidad salarial entre la población. De esta forma se reduce la desigualdad económica para que los empleos menos cualificados puedan optar a una remuneración mínima digna.
La variación en el Salario Mínimo Interprofesional afecta directamente a los trabajadores que no pertenezcan a ningún convenio y a aquellos cuyo salario está actualmente por debajo de esta cantidad fijada por el gobierno de cada país. En el caso de que la jornada laboral no sea de 40 horas, tendrá que calcular el salario en función de la jornada que realice. Este Salario se publica en términos brutos, es decir, antes de deducir las retenciones de impuestos por personas físicas y por las contribuciones a la seguridad social.
Anualmente, este importe debe de ir regularizándose en función del IPC del país para que no se quede desactualizado la capacidad de compra de los trabajadores.