Las Haciendas Locales tienen a su disposición un conjunto de impuestos, cuyo establecimiento puede ser obligatorio, o en algunos casos potestativos. Al igual que sucede a nivel autonómico, los municipios que sean capitales de provincia o de Comunidad Autónoma y posean más de 75.000 habitantes se benefician de la cesión de la recaudación de ciertos impuestos estatales.
Los impuestos que obligatoriamente han de recaudar los municipios son:
De igual manera, entre los impuestos que los municipios pueden recaudar voluntariamente, se encuentran los siguientes: